AF y Deportiva para personas con enfermedad cardiovascular
La enfermedad cardiovascular es la principal razón o causa de muerte tras los tumores, teniendo una tasa bastante elevada, sobre todo en mujeres.
A modo de resumen, la presión arterial es una medición de la fuerza ejercida contra las paredes de las arterias a medida que el corazón bombea sangre a través del cuerpo. Diferenciamos entre presión diastólica (presión sanguínea en las arterias cuando el corazón se relaja) y presión sistólica (presión sanguínea en las arterias cuando el corazón se contrae), y los valores medios que presentan son:
Como podemos observar si los valores son 9/14 o más, son personas que presentan hipertensión arterial (HTA) que se trata de un incremento de la presión sanguínea en las arterias. La HTA puede deberse a un aumento del volumen sanguíneo por exceso de sal y agua o por el estado de los riñones, del sistema nervioso o de los vasos sanguíneos. Esta hipertensión arterial está asociada a la arterioesclerosis, que se trata de un daño en la arteria por alta presión debido al acúmulo de colesterol LDL en el endotelio de la arteria. Normalmente se presenta mayor riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular en:
Raza, los afroamericanos tienen mayor riesgo de sufrir esta enfermedad.
Obesidad.
Estrés.
Exceso de alcohol.
Exceso de sal.
Tabaco.
Diabetes mellitus.
Antecedentes familiares.
Los estadios 1 y 2, sólo modificando el estilo de vida podríamos disminuir la incertidumbre cardiovascular. Mientras que el estadio 3 requiere exclusivamente de fármacos.
Enfermedades cardiovasculares
Cardiopatía isquémica: afecta a las arterias coronarias y puede ser angina de pecho e infarto agudo de miocardio.
Enfermedad cerebrovascular: puede deberse a una isquemia (falta de oxígeno) o a una hemorragia (por acumulación de sangre) y puede ser una hemorragia intracerebral, un infarto cerebral o una oclusión y estenosis de arterias precerebral y cerebral.
Insuficiencia cardíaca: se debe a que los ventrículos son capaces de bombear menos sangre.
Factores de riesgo para padecer enfermedades cardiovasculares
Factores de riesgo no modificables: sexo, genética, raza.
Factores de riesgo modificables: tabaco, alcohol, obesidad, estrés, sedentarismo, colesterol, diabetes, hipertensión, etc.
Numerosos artículos científicos corroboran que el sedentarismo y la obesidad suponen un alto riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares (ECV), así como corroboran el efecto protector que tiene la actividad física contra las ECV.
Evaluación de la salud pre-participación
Previo a cualquier intervención de un programa de ejercicio o actividad física, de naturaleza preventiva o terapéutica, es de suma importancia llevar a cabo las evaluaciones de salud correspondientes para la seguridad del ejercicio. Para ello utilizamos los siguientes cuestionarios para evaluar el riesgo cardiovascular:
Physical Activity Readiness Questionnaire (PAR-Q)
AHA/ACSM Health
Efectos del ejercicio sobre la hipertensión
El ejercicio físico provoca:
Efectos agudos: reducción de 5-7 mmHg inmediatamente después de una sesión de ejercicio.
Efectos crónicos: promedio de reducción de la presión arterial con ejercicio regular en pacientes hipertensos. Los valores aproximados son de 10 mmHg menos en la PS y de 8 mmHg en la PD.
El efecto hipotensivo del ejercicio reduce el riesgo de padecer aterosclerosis, accidentes cerebro-vasculares, insuficiencia cardíaca congestiva, insuficiencia renal, presión intraocular, entre otros.
Precauciones a tomar en el paciente cardiovascular
Si practica deporte con asiduidad y no es hipertenso, tomarse la tensión arterial al menos una vez cada 6 meses. Los estados iniciales de la HTA son asintomáticos, por lo que puede ser hipertenso y no saberlo.
Si la tensión es mayor a 140/90 mmHg debe demorar el inicio de la actividad física.
Comunicar al médico la práctica de ejercicio físico.
Planificar el entrenamiento.
Si durante el ejercicio nota dolor de cabeza, palpitaciones y enrojecimiento cutáneo, y a pesar de bajar el ritmo de la actividad persisten los síntomas se debe parar de inmediato.
Hidratarse con agua o bebidas isotónicas con poca cantidad de sodio porque pueden elevar la presión arterial.
Como consideraciones generales es muy importante recoger toda la información médica necesaria del paciente, conocer los intereses y posibles motivaciones de cada sujeto y establecer metas realistas y progresivas que permitan apreciar el propio progreso. Además de incluir variedad de ejercicios para asegurar la adherencia y que las actividades sean dirigidas por personal cualificado.
Para este tipo de personas es muy efectivo el entrenamiento de fuerza en circuito, así como el entrenamiento del equilibrio y la flexibilidad.